El relato de Julio comienza en su adolescencia, durante el movimiento estudiantil de 1968, del que es más testigo que protagonista, aunque esos años convulsos lo marcaron. Con el tiempo, desarrolla una filosofía de vida particular, estrictamente personal, y alcanza el éxito como empresario al erigir una empresa que pronto compite con las multinacionales de la industria química.
Julio encarna la vida de su medio y generación; estudios, trabajo duro, un divorcio, ascenso económico logrado a base de esfuerzo y dedicación hasta la llegada de la inestabilidad económica del país y la inseguridad.
Con una narrativa ágil y fresca, “Camino cuesta arriba” no sólo cuenta la vida de un hombre, al par de sus alegrías y tristezas, se revelan los riesgos y obstáculos del mundo de los negocios, la oscuridad de los caminos de la política, la falta de escrúpulos y la crueldad.